España clasificó a la final de una Copa del Mundo por primera vez en su historia y para un país tan futbolero y que además desde hace unos 15 años que tiene una de las mejores tres ligas del planeta, no es un hecho menor.
Por esto, luego del enorme triunfo logrado por los dirigidos por el Bigotón ex Real Madrid (fue DT de los Galácticos), Vicente del Bosque, una gran cantidad de españoles de todas las ciudades salieron a festejar a las calles y así sumarse a aquellos que vivieron el partido por pantalla gigante en las inmediaciones del estadio Santiago Bernabéu (Real Madrid).
Este logro llega en un momento muy particular para el país ibérico, el cual se encuentra en plena crisis financiera y malestar popular por la recesión, los recortes y ajustes.
Al igual que ocurrió cuando el Niño Torres ajustició a los alemanes y la Roja se consagró en la Euro 2008, toda España estalló cuando Viktor Kassai pitó el final del juego y sentenció a la Madre Patria a disputar la final ante Holanda.
Luís Aragonés era el DT en aquella Euro y Vicente del Bosque continuó con su legado: jugar siempre al ras del piso, con inteligencia y vocación ofensiva.
Fuegos artificiales, bocinazos de automóviles y tres gritos que se convirtieron en Hits: "¡Yo soy español, español, español!", "¡Adiós, Alemania, adiós!" y "¡A por Holanda!". Los nombres de Iker Casillas (arquero y capitán) y Carles Puyol, autor del gol de la victoria, fueron los más coreados de la noche.
El festejo se hizo unánime en bares y en grupos de gente que inundó las calles del país para celebrar con euforia. Los autos hacían sonar sus bocinas mientras sus ocupantes agitaban banderas, según publicaron los medios españoles. Ahora, a España sólo le queda enfrentar a Holanda y salir campeón del Mundo. ¿Nada más?
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